LOS NIÑOS INMUNODEPRIMIDOS, EN RIESGO
La neumonía es una infección respiratoria aguda causada por virus, bacterias u hongos, como el ‘streptococcus pneumoniae’, causa más común de neumonía bacteriana en niños; el ‘haemophilus influenzae’ de tipo b (Hib), la segunda causa más común de neumonía bacteriana, o el virus sincitial respiratorio, causa frecuente de neumomía vírica.
Los síntomas de la neumonía vírica y los de la bacteriana son similares y entre ellos figuran la respiración rápida o dificultosa; la tos; fiebre; escalofríos; pérdida de apetito o sibilancia, más común en infecciones víricas.
En casos de neumonía grave, los niños pueden presentar depresión o retracción de la parte inferior del tórax durante la inspiración. En lactantes, puede ocasionar incapacidad para consumir alimentos o líquidos, así como pérdida de consciencia, hipotermia y convulsiones.
La mayoría de los niños sanos pueden combatir la infección mediante sus defensas naturales, pero los inmunodeprimidos presentan un mayor riesgo de contraer esta enfermedad.
El aumento de los casos de neumonía en El Salvador ha obligado al Gobierno del país a declarar la Alerta Roja. En lo que va de año, 300 personas han muerto a causa de esta infección respiratoria y 53.000 se han contagiado. Los hospitales no dan abasto para atender a los enfermos, la mayoría niños que no cuentan con los recursos suficientes para pagar la medicación. Por este motivo, organizaciones como Fundación Intervida, han desplazado ayuda a la zona.
La Organización Mundial de la Salud califica la neumonía como la infección respiratoria aguda que más muertes provoca a nivel mundial, la mayoría en países en vías de desarrollo.
La pobreza, el cambio climático, la desnutrición, la escasez de higiene en la vivienda y la contaminación son algunas de las causas de esta enfermedad, que en algunos países se ha convertido en un problema “estructural”.
En El Salvador, la neumonía afecta ya a 53.000 personas, una cifra muy preocupante si se compara con los 57.600 casos detectados durante todo el año pasado. Una de las principales causas es el elevado índice de contaminación medioambiental en el país, “muy ligado al padecimiento de enfermedades alérgicas y respiratorias como la neumonía”, señala la Fundación Intervida.
En esta línea, para paliar el problema y ayudar a las personas infectadas, el Gobierno salvadoreño ha incrementado sus fondos para comprar medicamentos y contratar a más profesionales, y entidades como la Fundación Intervida han incrementado su ayuda en la región.
En concreto, la ONG ha desplazado cinco equipos médicos de Guatemala a El Salvador para atender a la población más necesitada del departamento de La Libertad, uno de los más pobres del país. Estos profesionales ayudan a 400 pacientes cada día y remiten a los centros hospitalarios a los que presentan mayor gravedad. La ayuda es de vital importancia en un país donde la mitad de su población vive con menos de dos euros al día.