Como la Educación es la base del desarrollo económico, de la inclusión social y del desarrollo de una ciudadanía democrática y productiva;
A través de la Educación podemos incorporar conceptos que tiendan a eliminar los patrones socioculturales que impiden la equidad de género, dado que el mayor índice de abandono escolar y no matriculamiento es producido por las mujeres, debido a factores como escasos recursos “la familia opta por que estudie el varón” y una serie de otros, producidos por no haber sido educados en equidad de género; lo que genera que a la hora de las decisiones por patrones socioculturales inculcados a través del tiempo por una educación sin equidad de genero, se acabe discriminando casi inconscientemente a la mujer.
Para mejorar la calidad humana de los individuos que componen las sociedades es indispensable, iniciar dentro de un marco de dialogo medidas que tiendan a favorecer el acceso de la mujer a las diferentes áreas de decisión, de educación y de producción.
La Educación en equidad de género desde el seno del hogar hasta la vida conyugal se torna imprescindible para mejorar el desarrollo socioeconómico del país.
La mujer se encuentra entre los grupos menos aventajados y mas vulnerables, dados los patrones socioculturales existentes en los niveles socioeconómicos de países en vía de desarrollo, al educar en equidad de género, mejoraremos los resultados educacionales, sociales, económicos, culturales; y crearemos condiciones favorables para el desarrollo integral de este grupo. Combatiendo la deserción y la repetición escolar.
Una estrategia puede ser el de fortalecer la efectividad del cuerpo docente, al educar en equidad de género, porque solo así, se mejorará elsistema educativo y este efectivamente preparará, desarrollará, reclutará docentes de excelencia, capaces de eliminar los patrones socioculturales que impiden la equidad de genero y provocan la deserción escolar, afectando el desarrollo económico y productivo de los países en vía de desarrollo, al quedar excluido de la cadena productiva por estos patrones la mujer en la mayoría de los casos.
Al educar en equidad de género fomentamos efectivamente una cultura democrática, donde no existan patrones socioculturales que impidan la equidad de género y con esto el desarrollo integral de la mujer, afectando al sistema productivo, al no aprovechar, ni capacitar sus recursos humanos.